Una despedida que hago mía.

Llega el fin de curso. Estamos a Junio del año del Señor 2006. Mis alumnos de 2º de Bachillerato comienzan mañana sus pruebas de acceso a la Universidad. Está claro que les deseo la mejor de las suertes en estos días. ¡Ánimo!

Como anécdota, les comento (y ahora me dirijo especialmente a esos alumnos de 2º de Bachillerato) que hoy tuve una mala noticia en el Instituto. Me enseñaron la orla que mis alumnos van a recibir con motivo de su graduación y... ¡yo no estaba! Habitualmente no suelo dar mayor importancia a este tipo de detalles (tampoco es que una orla sea tan vital y, además, seguro que hubiera salido bastante feo y que mi ausencia beneficia el resultado final...), y sé que esta omisión se debe a un fallo técnico del que no hay que culpar a nadie... Pero, sin embargo, y para mi sorpresa, me puse triste. Porque, pequeños saltamontes ;), fue un placer darles clase durante este curso y... ¡quería salir en esa orla, para que no se olvidaran completamente de mí!

Y en cuanto a mis alumnos de la ESO, y de Primero de Bachillerato, pues agradecerles su colaboración, y el buen rollo que siempre han tenido en clase y fuera de clase, y animarles a trabajar más duro el próximo curso.

Yo no soy persona de muchas palabras. Me gustaría que este mensaje de despedida de curso fuera más largo y entrañable, pero no reflejaría mi verdadera personalidad, más distante y austera. Sin embargo tengo un compañero de trabajo que también ha aprovechado estos días para despedirse de sus alumnos, y lo ha hecho de una manera admirable. Su despedida creo que va dirigida en realidad a todos los alumnos del Planeta Tierra, así que recomiendo encarecidamente su lectura:

Despedida a unos alumnos (extensible a todos los alumnos, creo)

PS: Para aquellos que queráis pegar en vuestra orla mi foto, caso de que el fallo técnico antes comentado no pueda arreglarse, aquí va esta pequeña imagen:

Foto DNI: Foto mía para completar orla.